31 de enero de 2011

25 de enero de 2011

Cabezas de piedra



Castelli 562


Italia y O'Higgins




Brown y Anchorena  (la así llamada casa del ángel), Joaquín Saurí


También acá en Bahía Blanca hay edificios con caras de piedra.

Están adosadas en el frente de algunas construcciones de los primeros años del siglo XX. Todos los rostros son diferentes: mujeres -más o menos bellas-, niños, algunos sonrientes, otros pensativos, algunos con mirada penetrante, otros con sus ojos ciegos, rodeados de laureles, conchillas gigantes, tocados antiguos.

¿A quiénes representaban estos rostros de piedra? ¿Quién los hacía?¿Cómo? ¿Había alguien acá en Bahía Blanca que se especializaba en este tipo de trabajo?

(Y no somos los únicos que nos hacemos estas preguntas)

Buscando alguna respuesta, recorrí atentamente el blog de Artemisia Comina quien tiene una espléndida serie de fotos de cabezas de piedra tomadas en Venecia. Y dice que en  los frentes de algunas casas y palacios venecianos se puso de moda adosar cabezas de esculturas perdidas o rotas; y luego a principios de siglo XX nuevas cabezas fueron hechas ex profeso por escultores que dominaban aún el arte y la técnica para copiar o inventar estos rostos con apariencia "antigua".

Acá, obviamente esculturas abandonadas no había, pero probablemente sí muchos albañiles, constructores y gente con dinero que podía encargar (¿acá? ¿o hacer traer desde Italia?) adornos como estos.

más allá de que los arquitectos que hicieron esas construcciones hayan sido uno alemán -Bauerle- o el otro catalán -Saurí; el de la casa de Italia y O'Higgins no sé quién es.

¿Y este espantoso y terrorífico león, que ruge amenazante desde una de las ventanas de la casa de Castelli 567? (no descartemos una función apotropaica, para este león en medio de los lirios)


Castelli 567

No es facil resistir la tentación de atribuir melancolía, pesar o sarcarsmo a estos rostros.
Pero es opaca la piedra.

Estas caritas no están en las fachadas de palacios venecianos:
(cliquear sobre la dirección para ver la carita de cerca)









9 de enero de 2011

Sonrisa de estuco

 

Brown y Colón. El arquitecto: J. Badaracco
(pero acá también, lo inquietante son los ojos entreabiertos, y sin pupilas.
Para comparar ver la entrada anterior a esta)

4 de enero de 2011

Ojazos de estuco

O'Higgins 280


Avda Colón 351




Fachada del teatro Don Bosco, Rondeau 125

¿El arquitecto? Según dice en el frente de cada una de estas construcciones, Justo José Bäuerle, alemán. Parece que vino a Bahía Blanca en 1903, después de haber trabajado en las obras del Puerto Militar.
A partir de esos años entonces se podrían datar estas casas.
Parece que proyectó muchas, muchas construcciones acá.
Pero yo me pregunto ¿de dónde vienen las caritas de estuco? ¿quiénes nos miran con sus ojos de yeso?


El extrañamiento como un antídoto contra el riesgo de dar la realidad por descontada, Carlo Ginsburg dixit, en Occhiacci di legno. Nove riflessioni sulla distanza, Feltrinelli, Milano, 1998, pagina 33

- Ojazos de madera, ¿por qué me miran? dice incómodo Gepetto cuando apenas termina de tallarle los ojos  a su muñeco de madera.
Carlo Collodi, Pinocchio, Firenze, 1883


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