Mientras muy lentamente avanzamos con el Espejo de Amor, he aquí uno de los 250 poemas escritos por Gaspara Stampa, (1523-1554), en medio de la mundana vida veneciana del renacimiento, en el momento de mayor auge del petrarquismo más exasperante, y a lo largo de su agitada historia de amor con el conde COLLALTINO DI COLLALTO.
Yo no soy Gaspara, ni petrarquista así que ni todas las rimas son consonantes, ni todos los versos tan estrictamente endecasílabos.
Oh noche para mí dichosa y clara
más que los más dichosos días, y más claros,
digna de ser por los más elevados
ingenios, no tanto por mí, alabada.
.
Tú fuiste fiel ministra de mis goces
solo tú todas las cosas amargas
de mi vida hiciste dulces y amadas
devolviendo a mis brazos a mi conde
.
Solo faltó que me convierta entonces
en la afortunada Alcmena, para quien
más de lo usual tardó en volver la Aurora.
Ni aún así nunca podré yo hablar tanto
y tan bien de ti, noche blanca, que no sea
por la materia superado el canto.
.
.
Tomado de Gaspara Stampa e Veronica Franco, Rime, a cura di Abdelkader Salza, Gius Laterza & figli, Bari, 1913, p 59.
No hay comentarios:
Publicar un comentario